lunes, enero 18, 2010

Ya vendrá la luz

Si la suma de momentos resulta insuficiente
Si el rompecabezas de tiempo no completa

Cuando hoy es lo que es y mañana no hay
Y se sabe y no se sabe…
hoy a amor sabe (Fragmento, Lisette Barba)


Yo debí morir en aquel momento,
Cuando se repartieron tus ojos y se esparció tu sonrsisa, desde lejos.
Ni siquiera se trata de querer, era cuestión de morir.
Debí desaparecer y no quedarme con este recuerdo.
Al instante, tu voz, debió matarme, así no me tendría la brisa de la repetición de tu nombre.
Muriendo la vida, viviendo la muerte.
Hubiese llegado volando a la orilla, dónde seguro te encontraría.
Sin la prisa del inventado tiempo, pero con infante urgencia.
A ciegas te reconocería y sin palabras te hablaría.
En esta dulce muerte, ese instante de habitar tus ojos.
Ésta caida no tiene fin, cuando voluntariamente se vive,
cuando la vida es demasiado humana.
Ya vendrá la luz, cuando muera otro instante observándote.

Regresa entonces si lo quieres
pero sin embargo no te olvides nunca de la coincidencia
porque la vida que si es vida
es la vida que casualmente nos encuentra (Fragmento, Carlos Lemus)